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Valle
de Ordesa
Este
valle se merece una mención propia y especial, y bien pudiera
hablar y alabar
todas sus maravillas en cientos de paginas. Después de haber
estado trabajando
durante 3 temporadas en el Complejo Hotelero Ordesa, en Torla, y tras
haber
visitado el valle otras muchas veces, puedo decir que conozco muy bien
esta
joya de la naturaleza y que nunca me canso de visitar. El valle
ofrece
cientos de posibilidades para todos los públicos y lo mejor que
podemos hacer
es elegir un itinerario a nuestro nivel: Para familias, el fondo del
valle,
para andarines las fajas inferiores, para senderistas travesías
y
aproximaciones, y para alpinistas, escalada, y grandes ascensiones,
aquí hay de
todo.
Y es que existen en el Parque Nacional, famosas rutas que no siempre están al alcance de cualquiera, ya que requieren pasos de clavijas, trepadas y cierta costumbre al vacio del inmenso valle glaciar.
Después
de vivir in-situ las aglomeraciones y
visitas del verano puedo decir que hay muchas personas que “se
meten en camisas
de once varas”, menosprecian las distancias y la dificultad o
sobrevaloran su
potencial, bien por orgullo o cabezonería, pero casi siempre por
ignorancia.
Ignorancia de lo que supone un entorno natural de alta montaña y
sus
consecuencias.
La
geografía de este lugar es única e
inconfundible y bien merece su conservación. La ruta más
transitada y
“desgastada” es la famosa subida por el valle a Cola de
Caballo, un recorrido
muy recomendable pero fuera del periodo estival. El simple hecho de
subir a la
pradera de Ordesa desde Torla por la senda de Turieto, sin coger el
autobus, es
un espectáculo de cascadas entre pinos y hayas (algo obligado
para los que
vayáis con perro, que no dejan subir en el bus).
La senda de
cazadores (y faja de Pelay) es una
opción especial. Si la subes, la pechada que te metes de buena
mañana deja a
muchos en el mirador –algunos ni llegan- , sin ganas de seguir
adelante. Quién
decide seguir, el día se le hace largo y pesado. Y si se baja,
se corre el
riesgo de tener algún accidente debido al cansancio acumulado.
Evidentemente,
todo esto es para gente poco habituada a la montaña. De lo
contrario puede ser
una buena alternativa de escapada al saturado valle, bien para realizar
como
actividad única o bien como comienzo o termino de alguna otra
más larga.
Una excelente
idea es recorrer las fajas de
Racón y la de Canarriellos, bien seguidas o por separado. Ambas
son recorridos
fáciles y no muy largos, y se tiene una perspectiva muy bonita
del valle a
media altura, al tiempo que se pasa por la base de la cascada de
Cotatuero.
La faja de
las Flores es un recorrido
espectacular que ya no es apto para todo el mundo. Esto es debido a que
la
entrada y salida de la misma, requiere pasar las Clavijas de Carriata y
las de
Cotatuero. En las primeras no hay cable de seguridad y se han de trepar
dejando
a nuestras espaldas un patio, muy considerable para los que no
están
acostumbrados a la practica de montañismo o escalada. Y en las
segundas,
incluso los más acostumbrados deciden asegurarse con
arnés, por lo que sólo
aconsejo pasarlas “a pelo” si se tiene una experiencia
considerable, una caída
es fatal. Y no es que sean técnicamente difíciles, pero
tener 30-
Algunos
tiempos aprox.:
Torla-Pradera,
por Turieto: 1 hora
Torla-Sierra
de las Cutas: 3-4 horas
Desde la
pradera: a Cola de Caballo: 3 horas
a cascada de
Cotatuero: 1 hora
a Goriz: 4 h
a llanos de
Salarons: 4 horas
a Gruta Helada
de Casteret: 5-6 horas (por Cotatuero)
faja
Racón: 3-4 horas (completa)
faja
Canarriellos: 3 horas (completa)
